En vísperas del cumpleaños y cena de Miguel, actual pichichi del equipo, recibía el Poyete Team al Shaolin Soccer en lo que se convertiría en la segunda victoria consecutiva de los azulones. Victoria sufrida y trabajada ante un Shaolin que se quedó con un jugador menos tras la expulsión de Polluelo, bastante antideportivo todo el choque. El equipo realizó un encuentro de un nivel netamente inferior al de la semana anterior, fruto de las erróneas decisiones tomadas por el míster Ruby desde el banquillo. El conjunto adoleció de fútbol en la medular, tuvo cierto desorden y principalmente mostró una alarmante falta de puntería de cara a gol.
En la primera parte, ambos equipos se mostraron combativos y el choque parecía de un nivel muy parejo. El Shaolin sorprendió al Poyete, más centrado en la fiesta nocturna que en el partido, y llegó con peligro en varias ocasiones a la meta defendida por el almeriense Manuel Romero. Mientras Jesús se fajaba con maestría con todo el flanco ofensivo del Shaolin, el centro del campo formado por Héctor, Alberto y William no ofrecía muchas alternativas a la delantera. Adrián, uno de los galácticos de la plantilla, entró en el minuto 10 en lo que constituía su debut con la camiseta del Poyete. Se mostró enormemente participativo y dotó de desborde y velocidad a la banda derecha. El gol llegó pasado el ecuador de la primera mitad. William, que recibió el esférico en posible posición antirreglamentaria, se internó hasta la linea de fondo y envió un acertado pase atrás que el cumpleañero Miguel introdujo a placer en la meta rival.
La segunda parte resultó un monólogo del equipo azulón, especialmente tras la expulsión de Polluelo. También destacó el debut del vago defensa Dani. Salvo contados arreones del equipo del Shaolin, el dominio y las ocasiones fueron en su mayoría del Poyete, que, sin embargo se mostró desacertado de cara a gol. Jesús, que acabó desesperando al delantero rival, pedía al equipo más circulación de pelota y más ayudas a la hora de sacar el esférico dede atrás. El portero del Shaolin salvó en inumerables ocasiones a su equipo, desvaratando complicados disparos realizados por Miguel, Sáez y Alberto. Pero especialmente salvador se mostró en una jugada de bella factura entre Adrián y Héctor que el 23 azulón no supo materializar. Finalmente, sufriendo y pidiendo la hora, el Poyete amarró el resultado y se llevó los tres puntos para situarse en la zona templada de la tabla clasificatoria.
EL CRACK: Jesús. Inconmensurable por arriba y por abajo, desesperó a la delantera del Shaolin y protegió con pundonor la meta defendida por Manu. Arrancó las mayores ovaciones de la afición local.
EL DANDY: Miguel. Anotó el único gol del equipo y provocó la expulsión de Polluelo. Una "pastillita" en su honor.
EL DURO: Polluelo. Antideportivo, duro y violento, su terrorífica enrada sobre Miguel fue la acción más destacada en su particular partido.